Las especies exóticas son aquellas que se han transportado fuera de su ámbito ecológico natural como resultado de la acción humana. Sin intervención humana, la mayoría de ellas no son capaces de sobrevivir en un entorno extraño y terminan desapareciendo. Sin embargo, algunas especies sí logran adaptarse al nuevo entorno y terminan por implantarse en la naturaleza, llegando a causar daños ecológicos y económicos importantes.
Se calcula que, en Europa, existen más de 12 000 especies exóticas, de las cuales en torno a un 10-15 % son invasoras. Se encuentran representadas en todos los grandes grupos taxonómicos: mamíferos, anfibios, reptiles, peces, invertebrados, plantas, hongos, bacterias y otros microorganismos.
Igualmente, se las encuentra en toda clase de hábitats, tanto terrestres como marinos, de Europa. En mayor o menor medida, todos los Estados miembros de la UE tienen problemas con las especies exóticas invasoras presentes en su territorio.
Las plantas terrestres son, con mucho, las especies foráneas más comunes. Representan más de la mitad del total de especies de este tipo que se encuentran en Europa (más de 6 500 especies), seguidas de los invertebrados terrestres (más de 2 700 especies). Las especies acuáticas marinas son también relativamente abundantes, con un censo de cerca de 1 000 especies exóticas. En cambio, los vertebrados terrestres son mucho menos numerosos con apenas unos cientos de especies presentes en la UE. Fuente: Daisie 2009.
FUENTE: WWW.concienciaeco.COM